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Una buena meteorología a la espera de agosto

Una buena meteorología a la espera de agosto

La cosecha va a ser grande en cantidad. Tal vez no se superen registros de otras que han venido en los últimos quince años, pero, sin duda, se va a aproximar en kilos a las más productivas. La meteorología del año en curso ha sido benévola para la floración y el cuajado. No hubo heladas ni cambios bruscos de temperatura. Las perspectivas ya eran buenas. Se veían grandes, enormes racimos de tempranillo y en abundancia. Y la garnacha, al contrario de otros años, se había 'corrido' menos y traía más cantidad. Luego vinieron las lluvias que necesitaban los viñedos, algunas tormentas muy localizadas en Briñas, Cellorigo y alguna piedra suelta, una bajada de temperaturas que retrasó el proceso, sol y altas temperaturas para cortar enfermedades y, de nuevo, lluvias. La meteorología hasta final de julio ha sido favorable, veremos que nos trae agosto.