
Marqués de Murrieta: un lujo para concluir la temporada
Club de catas ·
María Vargas, enóloga de la casa, presenta el martes 13 (plazas agotadas) los vinos más icónicos de la bodega, que celebra este año su 170 aniversarioSecciones
Club de catas ·
María Vargas, enóloga de la casa, presenta el martes 13 (plazas agotadas) los vinos más icónicos de la bodega, que celebra este año su 170 aniversarioLogroño
Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.
Miércoles, 7 de diciembre 2022, 01:00
Mejor vino del mundo para su Castillo de Ygay 2010 (Wine Spectator 2021), mejor enóloga del mundo para su directora técnica, María Vargas (Women in Wine & Spirits Awards 2021), y Mejor Bodega del Mundo (Best of del Turismo de la Great Wine Capitals 2022) para Marqués de Murrieta. Son las credenciales más recientes de la casa, que celebra este año su 170 aniversario y que es historia viva de Rioja, con sus luces y sus sombras, aunque ahora mismo quizá en el momento más brillante de su dilatadísima trayectoria.
Nada es por casualidad y lo que está ahora recogiendo Murrieta es el fruto del trabajo de la familia Cebrián-Sagarriga por la excelencia, un camino que comenzó a principios de los años 90 del siglo pasado con la idea de devolver a Murrieta a la liga de los grandes vinos del mundo. La apuesta del entonces muy joven Vicente Cebrián no fue otra que la de otra joven enóloga de Haro, María Vargas, hoy directora técnica de Marqués de Murrieta y de Pazo de Barrantes (Rías Baixas) y que, con veintipocos años, asumió el reto de renovar todos los vinos de Murrieta en un momento crítico además para una bodega clásica, como era la etapa de la 'parkerización' y del exceso. María Vargas pondrá el próximo martes 13 de diciembre (a las 20 horas en el hotel Gran Vía, de Logroño) el broche final a la temporada de catas de lomejordelvinoderioja.com y lo hará con varios de estos vinos icónicos de Murrieta.
Comenzará con Pazo de Barrantes 2019, un extraordinario varietal de albariño de sus viñedos de la finca de Rías Baixas con el que la enóloga quiso dar un paso al frente: «El albariño es una gran variedad para el envejecimiento pero, por su éxito comercial, se estaba consumiendo demasiado rápido», recuerda. «Estuvimos varios años haciendo pruebas hasta que dimos con la tecla con este 2019 y, de hecho, pasamos dos campañas en blanco sin vender Pazo hasta que este año estuvo listo para salir al mercado».
A continuación, María Vargas presentará Primer Rosé de Marqués de Murrieta 2021, un 'jueguete' fruto de la experimentación y empeño de la enóloga en recuperar una referencia que Murrieta dejó de hacer hace muchas décadas: «Probamos con tempranillo, con graciano, con tempranillo y viura..., pero no conseguíamos el rosado que buscábamos y, al final, lo encontramos en el mazuelo», detalla. El vino es muy particular, y de largo recorrido: «La primera añada fue 2015 y vamos a probar 2021; no es un vino de larga crianza, pero sí que la acidez natural del mazuelo le aporta un recorrido longevo».
Marqués de Murrieta Reserva 2018 es la 'máquina' que lo mueve todo. El clásico por excelencia que llega a los cinco continentes: «Es la primera añada que ya elaboramos en la bodega nueva [tras más de 20 millones de inversión] y de una cosecha que, aunque no está catalogada entre las mejores, nos dejó en Finca Ygay vinos muy frescos y afrutados que están dando muy bien la cara». Dalmau 2019 se probará en primicia, ya que será la próxima añada en salir. Lleva el nombre del propietario (Vicente Dalmau Cebrián) y fue la respuesta de Murrieta a la demanda de vinos de primera impresión frutal: «Es uno vino de un pago, Canajas, de la finca Ygay, con tempranillo, cabernet y graciano de viñedos muy viejos de bajísimo rendimiento», explica María Vargas. «Es nuestra propuesta más expresiva, pero en el que, además de carácter, también vamos a encontrar mucha finura», avanza.
La cita: Martes 13 de diciembre, a las 20 horas en el hotel Gran Vía, con plazas para los primeros inscritos en Oferplan de larioja.com | Plazas agotadas
Los vinos de la cata: Pazo de Barrantes 2019, Primer Rosé 2021 de Marqués de Murrieta, Marqués de Murrieta Reserva 2018, Dalmau 2019, Capellanía 2017 y Castillo de Ygay Gran Reserva Especial 2011.
Capellanía 2017 es otro de los grandes vinos de Murrieta. Un blanco (viura 100%) de un pago de Ygay del mismo nombre y con el que Vargas quiso recuperar el espíritu de aquel histórico Dorado de Murrieta, pero totalmente actualizado al siglo XXI: «Es un blanco poderoso y, por eso, hemos querido meterlo entre Dalmau y Castillo». «Para mí –continúa–, Rioja puede ser igual de grande elaborando tintos que blancos con estas variedades históricas».
Y el cierre lo pondrá el Castillo de Ygay Gran Reserva 2011, la siguiente añada al mejor vino del mundo: «¡Uff!, pobrecito», ríe María Vargas, «ha nacido con una responsabilidad extraordinaria, pero a mí la añada 2011 me encanta; es más concentrada y con un perfil diferente, pero ahí está la magia del vino». No ha sido fácil para la enóloga elegir las seis referencias de la cata –«supongo que algo parecido le pasa a Luis Enrique para decir quienes juegan», bromea Vargas–, aunque tenía claro que Castillo estaría en la alineación: «Solo lo hacemos en añadas muy, muy especiales y es el vino que más responsabilidad conlleva». «Vicente apostó por él, por dejar claro que Castillo era la gran marca de Murrieta cuando la moda pedía otras cosas y, personalmente, también pienso que un vino de talla mundial tiene que ser grandioso, pero a la vez con una capacidad de envejecimiento enorme».
Publicidad
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.